Se trata de una herramienta que mejora la digestibilidad del forraje, aporta energía, proteínas de origen vegetal y urea. En pruebas a campo, los ovinos suplementados con estos bloques ganaron seis kilos en relación a los no suplementados.


En la Patagonia, un equipo del INTA explora alternativas para reforzar la alimentación del rodeo ovino.

En este caso, un grupo de profesionales de Santa Cruz está estudiando la incorporación de bloques nutricionales, hechos con melaza, en la dieta de aquellos animales que requieren suplementación.

Se trata de una herramienta que mejora la digestibilidad del forraje, aporta energía, proteínas de origen vegetal y urea. Además, busca cubrir requerimientos de minerales y vitaminas a los ovinos que se encuentren en condiciones extensivas de pastoreo.

La incorporación de estos bloques nutricionales surge como estrategia para suplementar los animales que se encuentran en pastoreo. Rodrigo Gallardo, especialista en producción animal del INTA Santa Cruz, indicó que luego de tres años de prueba comenzaron a verse los resultados.

“Si bien sobre la condición corporal en ovinos pudimos constatar que la variación fue en el peso vivo la diferencia es notable. Hemos obtenido resultados de seis kilos de diferencia entre los suplementados por sobre los no suplementados”, graficó el profesional.

Y agregó: “Con nuestros ensayos pudimos determinar también que las épocas en las que los ovinos consumen los bloques son el invierno y el verano, cuando la calidad del pastizal natural es baja. Y se destacan especialmente los meses de frío, que fue cuando el consumo creció notablemente”.


BLOQUES NUTRICIONALES PARA LOS OVINOS
Gallardo señaló que en sus diferentes formulaciones -ovinos y bovinos. incluyen aditivos técnicos y materias primas nutricionales de alta calidad.

Cada bloque pesa 30 kilos, se elabora mediante la deshidratación de la melaza y está diseñado para vehiculizar de manera práctica y segura, energía, proteínas de origen vegetal y urea.

Además, cubrir requerimientos de minerales y vitaminas a bovinos y ovinos de todas las categorías que se encuentren en condiciones de pastoreo.

Desde 2022, el el INTA se avanzó en otros ensayos con distintas categorías de ganado: corderos, borregos, corderas de reposición, ovejas cruza de Potrok Aike y en bovinos en zonas de Calafate.

Entre las principales ventajas de su uso, el profesional ponderó que se trata de una herramienta de suplementación práctica, segura y eficiente y de bajo costo operativo, debido a que no necesita comederos, mixers o tractores para su uso.

En paralelo, su alto contenido de azúcares -proveniente de la melaza- proporciona un importante suministro de energía fermentable por la microflora del rumen, lo que mejora la digestibilidad del forraje.

“Gracias a las características del producto, el bloque puede ser utilizado como un suplemento de la dieta durante todo el año, complementado y equilibrando raciones, mejorando la digestibilidad del forraje y su ingesta, lo que mejora el rendimiento animal”, concluyó Gallardo.