Un estudio elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario, en base a datos correspondientes a 2022, pone blanco sobre negro qué cadenas pagan este impuesto y cuántos millones dejan en las arcas fiscales.


Primero fue Horacio Rodríguez Larreta, que desde el escenario montado en la 135° Exposición Rural de Palermo ratificó su promesa de retenciones “cero”, a partir de su primer día de gobierno –si fuese elegido presidente– para todas las economías regionales.

Minutos después, el actual ministro de Economía y también precandidato, Sergio Massa, lo quiso opacar y anunció, de manera directa, que el 1° de septiembre dejarán de pagar ese tributo las únicas seis cadenas que lo siguen abonando: el maní, el vino, la industria forestal, el arroz, el tabaco y las cáscaras de cítricos.


Las preguntas que surgieron después de todas estas idas y vueltas fueron varias: ¿qué cadenas son las que todavía sufren el peso de las retenciones? ¿Cuánto aportan por año?

RETENCIONES A LAS ECONOMÍAS REGIONALES
Precisamente, respuestas a esos interrogantes son los que aporta un estudio difundido por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) que señala que, en 2022, las economías regionales exportaron mercadería por U$S 10.067 millones, de los cuales el 65% pagó alguna alícuota de derechos de exportación.

“Se estima una detracción de retenciones por un monto de US$ 470 millones en base a los datos de exportación de 2022, que equivale a un aporte en recaudación de 0,074 % en relación al Producto Interno Bruto (PIB)”, subraya el informe de la entidad rosarina.

El documento muestra así que todas las economías regionales, y no solo seis, todavía permanecen alcanzadas por este impuesto y que su eliminación, tal como proponen las fuerzas políticas, “es un paso fundamental que se debe realizar para no quitar competitividad exportadora a dichas economías”.



“Es más, es de suma importancia desarrollar políticas que favorezcan a incrementar la inversión, innovación, producción y desarrollo de mercados en este tipo de economías, dado que ya existen ventajas competitivas para exportar y dinamizan toda la economía doméstica por las características mencionadas anteriormente”, agrega el estudio elaborado por los economistas Francisco Rubíes, Bruno Ferrari y Julio Calzada.



UN PASO ATRÁS EN EL COMERCIO MUNDIAL
Como muestra del perjuicio que significan las retenciones, la BCR analizó la variación de la cuota de mercado mundial de las principales economías regionales de Argentina entre 2010 y 2019.

“Más allá de la competitividad que tiene el sector agroindustrial en nuestro país, casi todos los productos regionales han perdido participación en el mercado mundial desde el año 2010 a la actualidad. Esto quiere decir que Argentina se queda atrás en competitividad y pierde importancia en las exportaciones de estos productos”, precisa el informe.