A pedido del Ministerio de Economía, una resolución firmada por el Jefe de Gabinete dispone que el INAES “atienda las transferencias a cooperativas agropecuarias”. Dudas sobre su estado productivo.


El largo conflicto de la cooperativa láctea Sancor tuvo esta semana un nuevo capítulo: el Gobierno dispuso una ampliación del Presupuesto 2023 en el cual, entre varios ítems que no necesariamente están ligados al agro, dispone el giro de $1.200 millones a manos del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES). El fin del movimiento tiene que ver con apaciguar los ánimos entre las cooperativas de productores tamberos.

“Resulta oportuno aumentar el presupuesto vigente del INAES, organismo descentralizado actuante en la órbita de la Jefatura de Gabinete con el fin de atender las transferencias a cooperativas agropecuarias destinadas al Fideicomiso Financiero de Administración Reestructuración Sancor”, expone la decisión administrativa 50/2023.
El mencionado fideicomiso había sido creado a los efectos de abordar la situación de gravedad institucional de la compañía para brindar asistencia financiera destinada a la adquisición de leche, insumos y servicios productivos.

El texto lleva la autorización del Jefe de Gabinete Juan Manzur, a pedido del ministro de Economía Sergio Massa.

La normativa no solo comprende a lo relacionado con Sancor, sino que además contempla ingresos para Agencia Nacional de Discapacidad, la ANSES, ARSAT y la Secretaría de Derechos Humanos, que busca adquirir una aeronave Short Skyvan N80GB para su incorporación al Museo de la memoria que funciona en la exESMA.




¿CUÁNTO PRODUCE SANCOR?
Si bien para 2020 la cifra de procesamiento de leche por parte de Sancor rondaba los 650.000 litros diarios, hoy en día estimar su volumen actual se vuelve complejo para quienes siguen de cerca la dinámica de la actividad.

Un analista de la actividad lechera argentina aseguró que en la actualidad “Sancor está en una nebulosa informativa“.

“Es difícil conseguir de manera formal u objetiva algún dato. Dada la cantidad de plantas que posee podría procesar casi 2 millones de litros diarios, pero la situación de deterioro estructural hace difícil que los productores quieran venderles su materia prima“, graficó ante la consulta de Infocampo.

Ante ese panorama, describió el analista, una de las operaciones frecuentes es la de compra de “leche spot”, tal como se conoce a la leche cruda en el mercado libre. Esa práctica se realiza de contado ante el cuadro de trabas impositivas y bancarias a raíz de su estado financiero.

EL PARO, UNA AMENAZA LATENTE
Sobre el final del año pasado el conflicto escaló a tal punto de estar al borde de un paro general dispuesto por la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (Atilra), con alcances que se proponían llegar a todas las industrias lecheras del país.

Finalmente, 10 días después del llamado a la acción por parte de Atilra, el propio ministro de Economía intervino y se reunió con las partes para aliviar las tensiones.


El problema en Sancor se agravó luego de que en los últimos años Sancor intentara sobrevivir con la venta de numerosos activos, lo cual sin embargo no impidió que permaneciera en quebranto. En eso también influyó la posibilidad de un “salvataje” conversado con el entonces ministro de Producción Matías Kulfas, que tras su renuncia al cargo quedó sin resolver.