Al menos hasta el viernes se aguarda la continuidad de temperaturas de más de 40° en casi todo el centro y norte del país, según un pronóstico del INTA.


La ola de calor extremo que vive la Argentina, que ha llevado a que 11 provincias estén bajo alerta amarilla, se extenderá al menos hasta el próximo viernes.

Así lo indica el pronóstico semanal publicado por el Instituto de Clima y Agua del INTA, actualizado al 5 de diciembre pasado.
Los mapas de temperaturas proyectadas a dos metros del suelo muestran que las máximas permanecerán por encima de los 40° C en casi todo el centro y norte del país, este miércoles y al menos por los próximos dos días, y recién el sábado llegaría un leve alivio.
SIN AGUA EN LOS SUELOS
Esta situación complica aún más una campaña agrícola en el que el clima ha soplado todos los vientos en contra: la sequía es una de las peores registradas en la historia para el invierno y la primavera, en noviembre se dieron múltiples heladas tardías y ahora ocurrió una ola de calor extrema de manera temprana.

Hasta el momento, la siembra de cultivos gruesos es la más retrasada de la que se tenga registros y las condiciones climáticas no colaboran en lo más mínimo para que las labores tomen vigor.
De hecho, los mapas de balance de agua también elaborados por el INTA Clima y Agua muestran, al 30 de noviembre pasado (antes de que llegara la ola de calor), que solo zonas del noreste de Entre Ríos, sur de Córdoba; sudeste, centro y centro oeste de Buenos Aires, norte y centro oeste de la zona agrícola de La Pampa y San Luis, tienen entre el 40% y el 80% del agua necesaria a un metro de suelo.

“En el resto del área, el porcentaje se encuentra por debajo del 20%”, alerta el reporte.

Y lo que es más, en casi todas las regiones, el panorama empeoró en relación a los 10 días previos, y lo más probable es que haya seguido desmejorando en la última semana, a raíz de las lluvias que no llegaron y de las temperaturas que se dispararon.