Las Bolsas de Buenos Aires y de Rosario todavía no informaron datos significativos del progreso de implantación. El retraso es histórico, como la sequía. Y advierten por una "drástica caída de la inversión" en la oleaginosa.


Entre mediados de octubre y mediados de noviembre, apróximadamente, las regiones centro-norte y centro y sur del país progresan en las siembra de la soja de primera, ya que es su ventana óptima de implantación.

Sin embargo, iniciada la segunda mitad de este período, prácticamente, no hay progreso de implantación para la oleaginosa.
Precisamente, la Bolsa de Comercio de Rosario en su informe semanal para la zona núcleo habla de “retraso histórico” ya que “hay un 45% de la superficie sin sembrar (el año pasado para esta mismo momento la implantación había avanzado un 50%)” y alertan por “una drástica caída en la inversión del cultivo”.
Por su parte, este jueves, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, tampoco dio precisiones sobre el progreso del cultivo en su tradicional panorama agrícola semanal. Pero sí hizo referencia al maíz, del que se ha implantado solo el 22,9% de la superficie esperada, cuando el promedio para esta época del año se ubica en 50%.

Sin dudas, el ritmo de esta campaña lo está marcando la falta de humedad de los suelos, la falta significativa de lluvias y La Niña (Ver Mapas).


De esta forma, las severas condiciones climáticas de inicio de campaña indican que esta campaña es la más atrasada en 12 años para la oleaginosa, dicen los analistas de la Bolsa rosarina.

Asimismo, hace un año ya se había sembrado la mitad de la soja en la región núcleo y, actualmente, solo hay 250.000 hectáreas, o sea, solo el 5%.

UNA SEQUÍA DE INVERSIONES
En los lugares más castigados por la falta de agua y por la gran preocupación, informa la entidad, se está replanteando la estrategia productiva y el nivel tecnológico que se aplicará este año en la oleaginosa.

Según los testimonios de los técnicos, no se analiza la aplicación de fertilizantes en este momento y la soja solo iniciaría la campaña con la inoculación. Aunque, en algunos casos, alertaron que ni tampoco inocularían el cultivo, factor fundamental para asegurar la nodulación y la fijación de nitrógeno atmosférico.
Asimismo, advierten que se necesitan 100 milímetros, mínimamente, para lanzar la siembra. Un dato que maneja el Gobierno ya que, a finales de octubre, desde Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, también de integrantes de la Dirección de Estimaciones Agrícolas y el INTA alertaron sobre las necesidades de humedad que padecen los productores.

Además, por la seca, el propio Gobierno comenzó con las medidas excepcionales.

Sin datos en el panorama agrícola, la Bolsa porteña había indicado, en el lanzamiento de la campaña gruesa, que de soja se sembrarían 16,7 millones de hectáreas esta campaña y la producción alcanzaría las 48 millones de toneladas.

Por el momento, la entidad no dio por iniciada, oficialmente, la campaña.