Un nuevo informe del INTA Marcos Juárez alerta sobre los insectos que, mayormente, están presionando a los cultivos agrícolas en este momento.


Un nuevo trabajo del “Sistema de alarma de plagas agrícolas”, del INTA Marcos Juárez, a cargo de los asesores expertos, Emilia Balbi y Fernando Flores, sacó a la luz las principales especies de insectos que están presionando sobre los lotes productivos entre agosto-septiembre.

En la introducción del informe se hace un apartado sobre la condición climática en el sudeste cordobés.
“El mes de agosto superó el promedio histórico de heladas agronómicas para INTA Marcos Juárez del periodo 1987 -2021, las precipitaciones están llegando con retraso respecto a años anteriores y el aumento de la temperatura se produce lentamente”, encabeza el artículo, por ende, la situación respecto a plagas no varió en gran medida respecto a la evolución descrita durante el invierno.
Para el Balbi y Flores, las colonias de pulgón negro de los cereales mencionadas en julio se mantienen en el campo, alcanzando en algunos lotes las hojas superiores de trigo, mientras que en varios trigales, con deficiencia hídrica severa, se registran altas poblaciones del ácaro Penthaleus major.


Por su parte, lotes que tienen/tuvieron cultivos de cobertura con participación de leguminosas albergan cortadoras por encima del umbral económico de control.

De acuerdo a los técnicos y para considerar en el monitoreo, Penthaleus major, que no teje una tela como en otras especies de ácaros, es de coloración azul oscuro, con las patas y las piezas bucales de color anaranjado. Tiene una longitud corporal aproximada de 1 milímetro y en la parte dorsal del cuerpo tiene la abertura anal, que se observa como una mancha rojiza.

Para este insecto, no existe una solución sanitaria registrada y solo la llegada de las lluvias podría provocar una disminución de la densidad poblacional.

ORUGAS CORTADORAS
En aquellos lotes que, debido a la falta de precipitaciones, se realizaron/se van a realizar barbechos químicos tardíos, o bien, que presentan/presentaron cultivos de cobertura con participación de Vicia villosa, debe prestarse atención a la presencia de orugas cortadoras.

Cabe recordar que que este grupo de orugas presenta una coloración con la que se camuflan muy bien en el sitio en el que habitan. Su umbral de daño económico es de 3.000 orugas por hectárea, que se traduce en una cantidad promedio de 0,3 orugas por metro cuadrado.