El análisis de precios mensuales que publica CAME muestra que el precio se duplica cuando se comparan los principales rubros.


De acuerdo a los datos de la canasta IPOD (Índice de Precios entre Origen-Destino) que confecciona la Confederación de la Mediana Empresa cada mes, en agosto, el consumidor pagó 5,9 veces más de lo que cobró el productor para frutas y hortalizas, mientras que el precio se multiplicó por 2,8 veces para la leche, los huevos, el pollo, la carne de novillo y la de cerdo, desde que salieron del campo hasta que llegaron a la góndola.

Entre los cinco agroalimentos que presentaron mayor diferencia entre origen y destino, integrantes de la canasta frutihortícola, están: limón (17,1), zapallito (15,7), zanahoria (10,6), manzana roja (9,3) y naranja (7,4).
Para los cítricos y considerando las alteraciones ocasionadas por la guerra en Ucrania, los productores explicaron la diferencia de precios origen-destino por la sobreproducción que fue volcada al mercado interno.
Mientras que en el limón se observó una caída mensual del 8% en el precio pagado al productor, la naranja se comportó diferente: el precio al productor aumentó mensualmente un 77% y el de destino un 19%.

Entre los productos que presentaron menor diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor, se encuentran dos productos de origen animal: huevos (2,1), pollo (2). Es decir, que el consumidor, en estos casos, pagó cerca de $ por cada $1 que recibió el productor animal.

La menor diferencia entre origen y destino se debió a que los huevos y el pollo, de acuerdo a CAME, se debe a tipo de sistema de producción integrada que tienen estas cadenas.

PARTICIPACIÓN EN GÓNDOLA
En promedio, la participación del productor explicó el 28% de los precios que pagó el consumidor en góndola. La mayor participación la obtuvieron los productores de frutilla, al igual que el mes pasado, mientras que la más baja la consiguieron los de limón.